Calidad, calidez y logística emocional

logisticaTom Hanks era Chuck Nolan, trabajador de FedEx. Vivía en Memphis, obsesionado con el tiempo, resolviendo problemas de logística en todo el mundo. De un lado a otro era solicitado para encontrar fallos y brindar soluciones.

Su novia de toda la vida, Kelly, se molestó con él en navidad, al preferir el trabajo antes de fijar la fecha de su boda. Nolan viaja a Malasia, pero una tormenta manda a pique al avión en que iba. Muchos paquetes que tenían que ser entregados se hunden con el avión y otros pocos emergen a la superficie junto con Nolan, quien sobrevive cuatro años en una isla desierta, pescando y desarrollando sus habilidades como cazador y recolector. Su amigo Wilson es una mancha de sangre plasmada en una pelota de voleibol. Con él platica e irónicamente, es el lazo que le salva de la locura. Un buen día, decide dejar de esperar a que alguien lo rescate y se salva a sí mismo, construyendo una balsa con los restos del avión. Los paquetes que salvó el día del accidente viajaban con él, pero una tormenta obliga a Nolan a dejarlos atrás, junto con Wilson. Sólo salva un paquete el cual tiene un diseño peculiar: un dibujo con alas. Vaga por días en el océano, hasta que un buque lo regresa a la civilización. Vuelve a Memphis, busca a Kelly, (quien rehízo su vida al lado de otro hombre) y finalmente, entrega el paquete en la dirección marcada, cuatro años después. Al entregarlo, deja una nota, en la que agradece a la destinataria, ya que el paquete literalmente “le salvó la vida”. (Película Cast Away, dirigida por Robert Zemeckis, en el año 2000)

Das click en el producto y ¿cuántos días después llega tu pedido? Empresas famosas de logística son tan exactas, que dan envidia. A contra reloj toman el producto en un punto del mundo y se comprometen a entregarlo en cualquier confín del universo. Su secreto radica en la palabra LOGÍSTICA. Pero, ¿hasta qué punto es válida? ¿En dónde raya la exageración?

Enlistamos el caso de Amazon, en donde un empacador tiene 0.33 segundos para meter un libro en su caja, sellarlo y dirigirlo a la línea de embarque. Hay aproximadamente cinco mil trabajadores y tres mil drones que ayudan a que la entrega de cada artículo se realice en las siguientes horas. Ante esta logística, desde el abastecimiento del producto, hasta la entrega del mismo en la dirección indicada, los procesos son medidos segundo a segundo. La presión con que trabajan los colaboradores forma el carácter y los empuja a alcanzar retos mayores. En palabras de John Rossman, (The Amazon Way) “Es el mejor lugar en donde odias trabajar”.

Hace unos días, salió a la luz un reportaje en el cual más de cien ex colaboradores de la empresa narran los episodios oscuros de lo que vieron ahí, en donde la persecución laboral, el llevarte al límite de tus capacidades y la presión en todo momento (mails enviados en la madrugada con la exigencia de ser resueltos antes de la mañana, por mencionar uno de los casos), nos dan una idea de lo que es trabajar bajo estas circunstancias. A pesar de todo lo “malo” que podría ser, hay cinco mil trabajadores que no sólo soportan las condiciones en las que se vive dentro de la empresa, inclusive hay personas que aman laborar bajo esas condiciones, porque solo así se sienten vivas. Susan Harker, la reclutadora de la empresa lo dice textual: -“Ésta es una compañía que se esfuerza por hacer cosas realmente grandes e innovadoras, y esas cosas no son fáciles”.

A pesar de ello, Amazon los reconoce al afirmar que: -“El éxito de nuestra empresa, es gracias a nuestros colaboradores”-. Entonces… ¿Cómo es que cinco mil personas logran dar lo mejor de sí mismos, trabajando de esta manera? Harker lo sintetiza de esta manera: -“Cuando existen grandes aspiraciones, la naturaleza del trabajo se convierte en un verdadero reto. Muchos no pueden con eso”.

Al ser tan innovadores en el servicio, aún no podemos hacer conjeturas de lo que ocurre con otras empresas dedicadas a la venta de productos vía internet; ya que no hay muchas opciones.

En México, Linio sería la más parecida, pero la logística de sus entregas es distinta; ya que la entrega corre a cargo de otras empresas (DHL, Estafeta y Fedex) y en algunos lugares, Linio Fleet se encarga de la entrega; dependiendo del tamaño y las características de la compra. De cualquier manera, en todos los pedidos realizados a este portal, se hace hincapié en que las entregas se realizan mínimo 5 días hábiles después, e incluso, las quejas constantes hacia la empresa es por la excesiva tardanza.

Debido al crecimiento del e-commerce en México, sólo Linio pasó de 4 mil visitas al mes, a 14 millones, en tres años). Por esta razón, constantemente reclutan personal, a quien se les brindan las prestaciones de ley, seguro de gastos médicos mayores, seguro de vida, ayuda en gastos funerarios, entre otros beneficios a los más de mil colaboradores de la empresa. A cambio, la empresa promete excelente ambiente y estabilidad laboral con capacitación pagada.

A pesar de los beneficios a los colaboradores, las quejas siguen llegando a la empresa, pero son más de 14 millones de visitantes, de los cuales menos del 1% representan quejas de los clientes.

¿Cuál de estas dos compañías tiene mejores procesos?, ¿La que surte en 24 horas, o la que recibe mil quejas por la tardanza de la entrega?

La logística es un término militar gestado por los griegos, (logistikos= razonamiento, cálculo) en donde se busca ubicar los productos/servicios en el lugar indicado, en un tiempo específico, buscando rentabilidad al máximo. De acuerdo a esta definición, podríamos decir que ambas empresas están en lo correcto. Aunque no comulgo ampliamente con el (mal-)trato a los colaboradores, creo que en ambas opciones tienen un mercado amplio para desarrollarse.

Tanto Linio como Amazon cumplen con la entrega de sus productos, esa es la finalidad principal de ambas. Lo que realizan para lograrlo es lo que difiere de lo “normalmente aceptado” y no es que una u otra estén equivocadas. Es simple percepción, ya que lo que es bueno para mí, no siempre va a ser bueno para ti.

Seguramente hay muchas empresas que tampoco comulgan con lo que pensamos, ahí radica la diversificación de las actividades humanas. Si viviéramos todos bajo los mismos cánones de lo que es “políticamente correcto” y lo que no, sería muy aburrida la vida. Insisto: no acepto los métodos de algunas empresas para potencializar la creatividad y el carácter de sus colaboradores, pero hay que reconocer que son estilos diferentes de acción y que logran cumplir sus metas y objetivos.

Nicolás Maquiavelo decía que “el fin justifica los medios”, pero yo creo que es mejor, cuando los fines son con buena voluntad para hacer cambios positivos.

Fuente: Pulso PyME

Feher & Feher 

Consultoría

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