A los 17 años, en su natal Smilijan (Lika, un pueblito de lo que hoy se conoce como Croacia); Nikkola Tesla, enfermó de cólera. Al borde de la muerte, su padre le prometió que, en caso de curarse, lo llevaría a la mejor escuela de ingeniería de Austria. Tesla no sólo se recuperó, sino que estudió y trabajó para una gran empresa de energía en París. Su maestro y Mentor, Georges Batchelor le envió a Nueva York con una carta dirigida a uno de los hombres más famosos de América, por sus descubrimientos en dicha materia: Thomas Alva Edison.

En la carta, textualmente, decía: “Conozco a dos grandes hombres. Usted es uno y el otro es el joven portador de esta carta”. A partir de ahí, Alva Edison y Tesla trabajaron arduamente en crear lo que hoy conocemos como la electricidad. Maestro y Asistente tenían grandes mentes, pero el estadounidense era mucho más arriesgado al negociar con las grandes compañías que buscaban llenar las ciudades con cables de cobre, para producir así, una gran empresa dedicada a la energía eléctrica. Nikkola Tesla siempre abogó en beneficio de la humanidad. Su sueño era, incluso, proveer a todo el mundo de energía gratuita, la cual se podía obtener de la naturaleza.

Los historiadores cuentan que la relación Mentor-aprendiz se rompió el día que, Edison, tras prometerle un pago por 500 dólares a Tesla, si corregía un error en el motor de inducción. Tesla lo solucionó, pero tristemente, dicho pago nunca llegó. A raíz de ello, se detuvo en muchas ocasiones por presión del gobierno y del mismo mentor con quien descubrió y mejoró muchas patentes.

Tesla vivió modestamente, ya que nunca dejó de invertir su dinero en nuevas creaciones, todas en pro de la humanidad. Sabía y anticipaba que algún día, sus inventos le ayudarían al mundo a compartir datos y sonido, sin necesidad de cables de por medio.

Nikkola Tesla fue reconocido como un gran inventor de diversas patentes, pero cuentan sus biógrafos e investigadores, que al ser una persona que buscaba iluminar la tierra de manera noble, sin buscar dinero de por medio, fue el enemigo de muchas empresas que ya contaban con las concesiones para explotar el mercado de la energía eléctrica, lo que potenció su olvido, desde el momento de su muerte.

De hecho, cuentan que el inventor “oficial” del radio fue el italiano Guillermo Marconi, aunque, años después, se descubrió que, efectivamente, había desarrollado el primer radio, pero utilizando 17 patentes descubiertas por Tesla, lo que se corrigió en la historia, muchos años después de su muerte, tiempo en el que el FBI incautó cualquier material que diera pie a sus investigaciones, y se dice, que muchos descubrimientos aún están clasificados como secretos de estado por el gobierno norteamericano.

Afortunadamente, desde hace un par de años, la gente interesada en dar el crédito al inventor, se han congregado para adquirir una de las propiedades abandonadas, en donde creó la primera antena que sería capaz de transmitir energía y radio frecuencias, para hacer un Museo en su honor.

Por ello, ponemos el ejemplo de este gran inventor, para que, ante cualquier circunstancia, no dejes nunca de…

• Creer en tus sueños de crecimiento emprendedor. No importa de qué tamaño es tu idea.
• Registrar y defenderte de cualquier amenaza, ante los organismos públicos que protegen la propiedad intelectual de tu marca.
• Buscar socios que, además de coincidir con tus pasiones, sean honestos.
• Escribir tu historia y compartirla con los demás.

La historia, muchas veces no nos da el crédito que merecemos, los ideales de este gran inventor dan la pauta para decir que a su modo y bajo las circunstancias que le permitían en aquél entonces, era un visionario de las empresas de energía sustentable. Hoy en día, la empresa Tesla, creadora de autos que circulan únicamente con electricidad, lleva el nombre de este genio quien, a pesar de todas las trabas, superó a su maestro y no solo eso; se ganó un lugar en la historia, por ser una de las personas que, con su noble corazón, deseó mejorar el mundo y por ello es conocido, cariñosamente, como “el genio que lo iluminó todo”.

Escrito por Ferenz Feher el 13 Ene 2017

Fuente: El Empresario.

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