Por: Luis Monter, Mtro. en Ciencias Políticas y Sociales
Feher Consulting, Octubre 2024.
La venta de una franquicia no es un juego; se trata no solo de un movimiento comercial que implica cantidades importantes de capital, sino principalmente de un compromiso serio por parte de las personas que adquirirán los derechos para usar determinada marca y convertirse en parte del negocio con las y los propietarios que otorgan la concesión de una Franquicia. Directa e indirectamente se establece una relación de sociedad cuyos antecedentes y conductas tienen amplias repercusiones tanto positiva como negativamente.
Saber más de tu futuro inversionista, la veracidad de su información, la situación de sus finanzas, la relación entre sus gastos e ingresos, la confirmación de la existencia de su domicilio, comercios y oficinas, su estado crediticio, el número de sus dependientes económicos, etc., son cosas que te ayudarán a saber si es una persona apta para adquirir un negocio y decidir asociarte con él.
Por ello, es recomendable que a aquellas personas que consideras candidatas a otorgarles una franquicia de tu negocio, inviertas en la realización en un estudio socioeconómico que te ayude a conocer, confirmar y comprender más de la vida de esa persona. Un estudio socioeconómico es un documento que nos proporciona información sobre el entorno económico, personal, familiar, social, cultural y laboral de una persona; este estudio se elabora a partir de información obtenida directamente de entrevistas y visitas domiciliarias, la investigación y validación de referencias, entre otros. Es decir, nos ayuda a saber más de la relación entre la actividad económica y la vida social de las personas.
Existen varios tipos de estudios socioeconómicos; básicamente cambian según sea la razón para la cual se está realizando y que puede ser para el otorgamiento de una beca escolar, para la contratación de personal, para la obtención de un préstamo crediticio o para la consecución de un arrendamiento, entre muchos otros.
En el caso de la solicitud de un crédito o para el arrendamiento de un inmueble lo que se trata de analizar es la capacidad de pago de la persona que está buscando el préstamo o rentar una casa, porque deberán verificar que la persona solicitante realmente tiene la capacidad para cumplir con los compromisos financieros que tiene y que seguramente se sumarán a los que está solicitando.
En el caso de una franquicia, es importante que inviertas en la realización de un estudio socioeconómico a tu inversionista para conocer un poco más de él. Saber si tiene hijos y si éstos van a una escuela pública o privada –por ejemplo–, en dónde vive y cómo es su casa, qué ingresos hay en su residencia, si esa persona es el soporte económico de la familia, cuántas personas dependen de él, qué gastos fijos además de colegiaturas hay en casa, si está pagando algún crédito hipotecario o automotriz, qué capacidad de ahorro tiene, etc. Es decir, si podrá realmente solventar la adquisición de una franquicia y los gastos posteriores que puedan surgir, cómo puede ser el adecuamiento del local.
Por eso, es importante que se considere la aplicación de un estudio socioeconómico para aquel inversionista que desea adquirir una franquicia, sobre todo para evitar problemas o complicaciones futuras. Incluso la otra parte, el inversionista, también podría considerar realizar uno a la empresa que le está otorgando la franquicia, para saber que todo con ellos esté en correcto funcionamiento.
Según la empresa Asyse, hay estudios que revelan que cerca del 30% de las personas evaluadas dan información falsa a la hora de atender un estudio socioeconómico. Suelen hacerlo para ocultar malas referencias (por conflictos pasados con otras personas o empresas), o por no tener los estudios requeridos (decir que tienen experiencia en cargos administrativos o de finanzas tan solo para cumplir con uno de los requisitos para la adquisición de una franquicia).
También está la posibilidad de ‘maquillar’ ingresos y salidas de dinero. Por ello, te aconsejamos que la información aportada siempre esté respaldada por estados financieros o de cuenta, donde realmente se pueda consultar la sanidad de las arcas de esa persona. Incluso se vale consultar el buró de crédito, si es que aún quedan dudas de su comportamiento crediticio.
Recuerda, que lo único que se busca es que evites riesgos como franquiciante y que puedas tener la certeza de que estás llevando a tu negocio a un inversionista confiable y honesto. Realizar estudios socioeconómicos puede ayudarte a evitar pérdidas de tiempo, dinero e incluso de información confidencial de tu negocio. Si aún no los realizas, puedes considerarlo como una opción en la elección de tus inversionistas.
Mtro. Luis Monter
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