Feher Consulting, Abril 2025
La historia de UMMA Farmacias comenzó realmente después de la pandemia por Covid-19, que representó como un reto de negocios para muchos. Al inicio, todo arrancó como una distribuidora de medicamentos, que daba servicio a múltiples farmacias y en varios estados de la República Mexicana; cuando todo era éxito, el mundo entró en confinamiento y, en consecuencia, las ventas cayeron.
Arturo Valencia, fundador de UMMA Farmacias, recuerda que para entonces ya conocían a fondo las entrañas de la comercialización de medicamentos, así como su distribución. Se le vendía a farmacias llamadas de botiquín, a distribuidores y subdistribuidores, a cadenas de farmacias, clínicas y hospitales. Un negocio exitoso. Sin embargo, el Covid-19 provocó que las ventas comenzaran a tambalearse y tuvieran que buscar otros caminos para mantener a la distribuidora con los márgenes que se tenían antes de la pandemia, porque, además, hace cuatro años la comercialización era muy diferente a como se maneja actualmente.
Al analizar cuál era el mercado principal de la distribuidora, comprendieron que el principal cliente eran obviamente las farmacias. Así que llegó la idea ganadora: poner una farmacia, aprovechando la ventaja de tener la posibilidad de acceder a precios de distribuidor y vender el medicamento a precio de farmacia.
Antes de crear una marca propia, Arturo se dio a la tarea de estudiar el mercado: analizó diversas compañías, las más famosas, como Farmacias del Ahorro o Farmacias Guadalajara, cuya inversión mínima para poner un establecimiento rondaba los tres millones de pesos. Las erradicó como opción, lo mismo que Farmacias Similares. Así que se creó una marca propia, que tuviera todos los servicios de una farmacia y cumpliera con todos los lineamientos legales, de sanidad y salubridad que se requieren para atender correctamente a los clientes.
Así surge UMMA, cuyo nombre viene de humano, de humildad. El pilar fundamental es la atención al cliente y ser un apoyo en la adquisición de medicamentos y en la procuración de su salud. ¿Por qué? Porque para las personas, la salud es lo más importante, y un medicamento siempre se va a vender, las personas hacen todo para salir delante de una enfermedad o un padecimiento.
Y hoy, lo que empezó como una prueba piloto ya cuenta con cinco unidades propias y está comenzando su camino como franquicia, para así expandir su negocio más rápido y de forma estratégica, dando a conocer la marca de forma más orgánica y efectiva. ¿Qué le ofrece UMMA a sus franquiciatarios? No solo la oportunidad de llevar salud a las personas a costos accesibles, que la hace diferente a la competencia, sino también la posibilidad de acceder a un negocio realmente exitoso.
Asimismo, los inversionistas podrán tener un proveedor exclusivo de medicamentos, lo cual erradica estar tratando con diversos laboratorios. Se les brinda total asesoría en cuanto al químico o médico responsable de cada farmacia, así como en el diseño e implementación de las instalaciones, todo alineado a las condiciones de COFEPRIS. Recomiendan que se tengan conocimientos básicos de administración y manejo de personal.
UMMA Farmacias es una franquicia de baja inversión, cuya inversión inicial ronda los 600 mil pesos; tiene un ROI de 25 meses. Es una magnífica oportunidad de tener un negocio redituable y llegar a un mercado que requiere mucha participación social para ayudar a la gente a tener salud.
¡Conoce más a UMMA Farmacias!