Creatividad y conciencia en el mes rosa: lo que como sociedad podemos lograr

El Día Mundial contra el Cáncer de Mama, que se conmemora cada 19 de octubre, representa mucho más que un gesto simbólico de color rosa: es una invitación a gobiernos, instituciones, comunidades y personas para actuar de manera decidida frente a esta terrible enfermedad. En México, los datos muestran que no podemos bajar la guardia: en 2024, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) reportó 8,451 muertes por cáncer de mama, de las cuales 8,384 fueron mujeres y 67 hombres; la tasa de defunción alcanzó 18.7 por cada 100,000 mujeres de 20 años y más.

Las cifras son contundentes, y la prevención, el diagnóstico temprano y la equidad en el acceso a servicios de salud siguen siendo componentes fundamentales de esta lucha. De acuerdo con los expertos, la diferencia entre la vida y la muerte radica en cuándo se detecta la enfermedad y qué tan pronto se tiene acceso a la atención de la enfermedad; el tiempo también es elemental para un tratamiento exitoso y sin complicaciones. Sin embargo, en muchos casos el cáncer de mama se detecta en etapas avanzas, lo que reduce las opciones terapéuticas y empeora el pronóstico. 

¿Hay factores que influyen en la aparición de dicha enfermedad?  Sí. Los médicos señalan que factores como el sobrepeso/obesidad, el consumo de alcohol, el sedentarismo y la falta de lactancia (cuando es posible), pueden incrementar el riesgo de padecer cáncer de mama. Por ello, es fundamental que el cuidado personal y entender que la prevención no solo es médica, sino también de uno mismo: la autoexploración mensual, la mamografía de tamizaje (sobre todo en grupos de riesgo como mujeres de 50 años o más, o antes si hay antecedentes de cáncer en la familia), así como la consulta oportuna en caso de presentar alguna anomalía (bulto, cambio de tono de piel, secreciones, etc.), son grandes coadyuvantes para la detección y atención oportuna del cáncer de mama.

Sin embargo, aún falta mucha educación en este tema. Aunque octubre se vista de rosa, hay segmentos de la población desinformados o que no le dan importancia al tema, por creencias añejas. Hay mujeres que no se realizan una mastografía anual por el temor a sentir dolor durante el estudio o porque la atención médica la recibe de un hombre. Mientras tanto el cáncer de mama sigue avanzando y lo hace en mujeres jóvenes de entre 20 y 25 años, y en mujeres de la tercera edad con más de 70 años. Ya no perdona la edad.

Allyson Penin, directora médica en Meik y creadora del aparato que permite realizar una mastografía por electroimpedancia, o mastografía sin dolor, explica que el cáncer se puede presentar en pacientes de entre 14 y 92 años, y que pese a todas las campañas de prevención que se realizan, el cáncer de mama sigue presentándose en cada vez más en las personas. Señala que Meik nace de la idea de tener un equipo portable, que no genere radiación ni dolor y pueda usarse en todo tipo de pacientes: embarazadas, adolescentes, personas de la tercera edad, hombres, entre otros.

Gracias a lo innovador de este aparato, su tecnología ha llegado a Rusia, Asia, Oriente y Occidente, donde ha logrado implementarse en todo tipo de poblaciones; arroja la misma información que la mastografía tradicional y permite detectar cualquier anomalía de manera instantánea, con resultados que se dan de forma pronta y que ayudan a tener un seguimiento inmediato, ya que de detectarse un bulto o masa se da la indicación de realizarse un ultrasonido mamario que ayude a verificar qué es lo que se halló en la mastografía por electroimpedancia.

Penin asegura que, aunque algunos gobiernos ya la tienen implementada, aún falta presupuesto gubernamental para atender integralmente el cáncer de mama, porque el presupuesto que se destina para ello es insuficiente. Por eso es fundamental que haya un sostenimiento del gobierno y de las organizaciones, así como recursos e infraestructura, capacitación de personal y un acceso oportuno a los tratamientos. Meik ya trabaja con diversas organizaciones de salud para llevar su tecnología al mayor número de personas.

También lo hace de la mano con MiBIA-METRIX, con quienes impulsa la detección oportuna del cáncer de mama. De manera conjunta acercan el conocimiento y la tecnología médica a las empresas, para cuidar la salud de los colaboradores antes de que existan enfermedades. Meik acerca su tecnología para que MiBIA-METRIX, empresa que se dedica a generar estrategias para transformar la cultura de bienestar dentro de las organizaciones, realice a la detección temprana del cáncer de mama, a través del aparato de electroimpedancia, en la gente que está en dichas compañías.

El cáncer de mama es una realidad implacable: en México afecta cada año a decenas de miles de mujeres, y cobra miles de vidas, y los números recientes no son optimistas. Sin embargo, sabemos que cuando la enfermedad se detecta a tiempo, cuando los sistemas de salud funcionan, cuando la sociedad se involucra, hay salvación, hay esperanza, y hay vidas que se pueden salvar. Es un trabajo de todos y no podemos bajar la guardia.

MiBIA-METRIX+ Información: https://mibiametrix.mx/