Un bowl que te dejará más que un buen sabor de boca

Durante la última década, la comida japonesa ha dejado de ser una rareza exclusiva para convertirse en una presencia habitual en el panorama gastronómico mexicano. Ya no se trata solo de sushi: el auge abarca desde experiencias omakase de alta cocina hasta cafeterías estilo kissaten, pasando por ramen, izakayas y conceptos híbridos que se adaptan al paladar local.

Lo cierto es que el sector de comida oriental en México, incluyendo restaurantes chinos, japoneses, y otros, está experimentando un crecimiento significativo, especialmente con el auge de la comida japonesa como el sushi. Este crecimiento se ve impulsado por el aumento en la popularidad del delivery y la conveniencia de opciones como el sushi en supermercados y tiendas de conveniencia.

Según Mordor Intelligence, el tamaño del mercado de servicios de alimentos de México se estima en 90,43 mil millones de dólares en 2024, y se espera que alcance los 138,81 mil millones de dólares en 2029, creciendo a una tasa compuesta anual del 8,95% durante el período previsto (2024-2029).

Las cifras no mienten: según el Directorio Estadístico Nacional de Unidades Económicas (DENUE) del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en 2023 existían en México al menos 4,654 negocios registrados que ofrecen sushi. Sin embargo, hay estimaciones que consideran que actualmente operan más de 1,600 establecimientos especializados en gastronomía japonesa en el país.

El consumo de comida japonesa en casa también está en aumento. El mercado de comida rápida en México, que incluye la opción de comida oriental, ha alcanzado los 11 mil millones de dólares en 2024 y se espera que crezca a una tasa compuesta anual del 4.80% entre 2025 y 2034, para alcanzar un valor de 16.15 mil millones de dólares en 2034, según EMR Claight.

Los cambios en el estilo de vida de los consumidores, la creciente tendencia a comer fuera de casa, especialmente entre los jóvenes, y la apertura de nuevos restaurantes en el país contribuyen a incrementar el tamaño del mercado de comida rápida en México. Y en cuanto a la tendencia hacia la comida japonesa hay una constante: el comensal tiene la idea de que es más sana, por encima de otro tipo de comida rápida.

Considerando todo lo anterior y teniendo muy claro que no existía un restaurante especializado en Poke Bowls, que ofreciera una opción saludable a las personas sin perder el peculiar sabor de la comida asiática, es que hace ocho años se creó en Monterrey, Nuevo León, Temakita. Se trata de una marca que ofrece a las personas una deliciosa combinación de mariscos frescos con arroz japones.

“Aunque ya existían marcas muy especializadas en comida asiática, en Monterrey no existía una opción como Temakita, pese a que sí existía un gusto por el producto. Así que, tomando tendencias del mercado vecino, se decidió construir un concepto ya popular en Estados Unidos”, explicó Jorge Ojeda, director de Temakita, quien asegura que lo que hace única la marca es precisamente el producto, seguido del servicio y de los precios competitivos que ofrecen para el público.

La marca actualmente cuenta con tres franquicias, dos en Guadalajara y una en Chihuahua. En el corto plazo esperan seguir expandiéndose bajo el modelo de franquicias, sobre todo en Ciudad de México, Tijuana y otras ciudades grandes en el país. También han volteado a ver el mercado de Torreón, Saltillo, Piedras Negras, Morelia y Guanajuato, donde esperan abrir mercado pronto. De acuerdo con Ojeda, en el mediano plazo tienen interés en alcanzar una expansión internacional, quizá empezando en España, donde radica una socia del corporativo.

¿Qué están buscando en un inversionista? Jorge asegura que buscan socios operativos, que sean franquiciatarios que sí se involucren y estén muy comprometidos con su negocio y con la marca. Explica que de esa manera se puede crecer más rápido y consolidar su éxito.

Como empresa franquiciante, le proporcionan a sus inversionistas toda la ‘paquetería’ necesaria y lista para operar el negocio: manuales de operación, relación con proveedores nacionales que garanticen la entrega de los mismos insumos en cualquier parte del país; incluso el corporativo posee una receta secreta que distribuye entre sus franquicias, estén donde estén. Cabe mencionar que se trata de una marca preocupada por el medio ambiente, así que el desechable que utilizan en 100% reciclable y biodegradable, y es una práctica que todas sus franquicias deben llevar.

Por otro lado, Jorge explica que no importa si la persona inversionista no tiene experiencia manejando un negocio como este, porque se capacita tanto al franquiciatario como a la gente que colaborará con él.

Esta franquicia, cuyo principal target son las mujeres de entre 23 a 35 años que gustan de cuidarse, representa una inversión promedio de entre 1.8 a 2.1 millones de pesos, así como un retorno de inversión de entre 18 y 21 meses, “un número muy serio, considerando que se trata de un restaurante”, asegura Ojeda y explica que “algo que coadyuva para el éxito de la franquicia es buscar una ubicación a pie de calle, dentro de plazas comerciales con buena plusvalía y cerca de locales de cuidado personal, gimnasios, spinning, pilates, entre otros”.

Cabe mencionar que Temakita forma parte de un grupo restaurantero con alto prestigio y presencia en Monterrey, que actualmente maneja nueve marcas y 190 unidades. Al ser parte de un corporativo, se beneficia de manera importante la relación con proveedores y la negociación de ubicaciones, además del sólido respaldo que brindan a sus inversionistas.

“Quienes se interesen en invertir con nosotros, es importante que sepan que están invirtiendo en una marca muy noble, fácil de trabajar y de operar, y que le dará muy buenos rendimientos, sobre todo porque su crecimiento sigue y la meta es que siga en ascenso”, puntualizó Jorge.